Toda una experiencia: un entorno delce e incomparable entre aguacates en la parte baja del pueblo, ropa adecuada a lo que se acontecía, en fín, una imagen vale más que mil palabras.
Gracias a José Mª Rivas por dejarme vivir estos momentos e inmortalizarlos.
El esparto, cada día menos utilizado aunque todavía hay quien sabe trabajarlo, se ha utizado siempre para hacer esteras, alforjas, cubrir garrafas...
En las fotografías, Antonio Martín, gracias por colaborar en su día conmigo.
En las fotografías, María Jiménez me mostró cómo se trabajaba con los bolillos.
Un trabajo de mucha atención y paciencia con resultados únicos.
Gracias por tu colaboración, María.
Pocos son los que mantienen el ganado caprino y ovino en el municipio, los bajos precios de leche y ganado y el costen de mantenimiento de los animales está obligando a quienes dedican su vida a esto el tener que abandonar esta simbiosis.
Mis agradecimientos a Diego Pérez.
Guante en mano, canasto o similar para ir recogiendo las castañaque se han ido madurando y cayendo al suelo. En las imágenes Juan Torres Marín y Roberto García Merino (mi sobrino).
Trabajo, duro donde los haya. Pocos son los que hoy día siguen utilizando el arado para la preparación de nuestras tierras. La escarpada orografía, el sistema de aprovechamiento de terreno en bancales demanda dicha práctica agrícola donde no puede entrar maquinaria.
En las imágenes Pedro Alcázar Moreno, amigo y vecino de toda la vida.
Talabartería, trabajo del cuero, apareos para mulos, caballos... Rafael Vera sigue elaborando y prestanto su tiempo enla elaboracíón de productos únicos y artesanales donde los haya.
La siguiente fotografía, especial para mi. Mi sitio de trabajo, el de mi padre y el que fuera oficio de mi abuelo paterno, José Merino Sánchez (José el Molinero).
Conservamos y trabajamos el horno de leña que se encuentra y se sigue caldeando cada tarde en nuestra panadería, (Ntra. Sra. del Rosario).
En la imagen, mi hermana, Silvia Merino Ruiz.
Irá añadiendo más fotografías conforme pueda.
